Aunque te suene raro, vamos a hablar de las plagas más habituales en invierno. Es cierto que, por norma general, asociamos la presencia de las plagas con los meses de verano y son muchas las ocasiones en las que tendemos a pensar que, con la llegada del invierno, ya no tenemos que preocuparnos. Si ese es tu razonamiento, desde aquí podemos decirte que te estás equivocando. No te confíes.
Aunque es verdad que las altas temperaturas de la época estival favorecen la presencia de plagas en nuestro hogar, el frío no hace que nuestra casa esté libre de las mismas. El cuidado de nuestra vivienda se hace tan necesario en invierno como en verano. De hecho, las bajas temperaturas pueden hacer que, por ejemplo, roedores o insectos se resguarden en algún tipo de escondite de nuestro hogar. Eso hace más difícil su detección, pero están presentes y pueden ser un peligro.
¿Cuáles son las plagas más habituales en invierno?
Como siempre, el trabajo de prevención es fundamental a la hora de evitar este tipo de plagas. Desde ADMA Plagas te recomendamos que, en caso de que tu casa ya haya sido objeto de la presencia de alguna plaga, recurras a verdaderos profesionales para la eliminación de la misma. A veces, por querer actuar y como dice el refranero, es peor el remedio que la enfermedad. Después de esta pequeña introducción, es el momento de conocer cuáles son las plagas más habituales en invierno:
- Roedores: Las ratas y los ratones son unas de las más peligrosas. Gozan de una fácil reproducción y eso hace que su presencia pueda multiplicarse en muy poco tiempo, con el riesgo que ello conlleva. Además, tienen una gran facilidad para esconderse, lo que les hace muy difícil de detectar.
- Termitas: Son insectos peligrosos para nuestros domicilios, sobre todo en estructuras de madera como pueden ser vigas o muebles. El invierno no les supone ningún obstáculo, ya que se adaptan con facilidad a la temperatura ambiente y pueden llegar a encontrarse realmente cómodos dentro de nuestra casa.
- Chinches y pulgas: Esta es otra de las plagas más habituales en invierno. Son pequeños insectos que se alimentan de sangre, por lo que es probable que, si ya los tenemos en nuestra casa, estén muy cerca de nosotros. Es por eso que sus lugares favoritos suelen ser, por ejemplo, los colchones o los sofás. Al igual que comentábamos en el caso de los roedores, también se reproducen con facilidad.
- Arañas: Aunque dentro de esta familia, hay diferentes tipos que pueden resultar peligrosas, no suelen serlo, ni mucho menos, aquellas que suelen hacer acto de presencia en nuestra casa. Tampoco son fáciles de detectar en invierno, ya que buscan escondites ante el frío.
En ADMA Plagas somos especialistas en la prevención y eliminación de plagas. Si tienes un problema, déjalo en manos de profesionales altamente cualificados. Te daremos la mejor solución. Un consejo: ¡No te confíes con la llegada del invierno!